Como en cualquier otro oficio, los trabajadores en obras de construcción
suelen tener problemas de salud, o están expuestos a posibles riesgos en su
propio trabajo, pero también deben de tener en cuenta que hay otros tipos de
trabajadores que están a su costado y que comparten un mismo ambiente en donde
desarrollan sus labores.
Los obreros sin percatarse de que están exponiéndose a
peligros, no toman las medidas adecuadas para prevenir contagios o contraer
alguna enfermedad, de la cual después tengan que lamentar.
Los trabajadores están expuestos a ciertos riesgos portados
por el aire pueden fijarse y ser absorbidos a través de la piel, como pueden
ser los pesticidas, o disolventes orgánicos. Por otro lado están los riesgos químicos
también se presentan en estado líquido, por ejemplo en pegamentos o adhesivos,
o pueden ser en polvo, como el cemento.
El contacto de la piel con estas sustancias químicas en este
estado puede producirse a la posible inhalación del vapor, dando lugar a una intoxicación
sistémica o una dermatitis por el contacto. Las sustancias químicas también
pueden ingerirse con los alimentos o con el agua, pueden ser inhaladas al
fumar.
Un trabajador no solo puede toparse con riesgos primarios de
su mismo trabajo, sino que también puede estar expuesto como observador pasivo
a los riesgos generados por quienes trabajan en su proximidad o en su radio, de
influencia. Este ejemplo de exposición es una de las consecuencias de tener
muchos patrones con trabajos de poca duración y estar en contacto con otros
trabajadores que generan otros riesgos.
Así como se tiene problemas al estar en contacto con
materiales químicos, tóxicos para la salud de un trabajador. También hay
riesgos físicos, de los cuales casi siempre se escuchan casos de este tipo. Pues
problemas de este tipo se pueden encontrar en cualquier proyecto de construcción.
Incluyendo el ruido, el calor, el frio, las radiaciones, las vibraciones y la presión
barométrica.
Los trabajadores de construcción se desarrollan en presencia
de calor o frio extremo, con tiempo ventoso, con niebla o de noche. La
maquinaria pesada ha transformado a la construcción en una actividad cada vez
más mecanizada, y también la ha hecho mucho más ruidosa, proviniendo de motores
de todo tipo. Los ruidos están presentes en los proyectos de demolición por la
misma naturales de su actividad.
El ruido no solo afecta al operario que maneja la máquina,
sino también a todos los que se encuentran cerca y, no solo causa la pérdida de
la audición, sino que encierra otros sonidos que son importantes para la comunicación
y seguridad.
En cuanto a los riesgos del calor o el frio surgen, porque
gran parte de su trabajo en construcción se desarrolla a la intemperie, que es
el principal origen de este tipo de riesgos. Los techadores están expuestos al
sol, a menudo sin ninguna protección, recibiendo fuertes cargas de radiación.
Por otro lado, están los trabajadores de construcción que
realizan labores en condiciones de frio extremo durante el invierno, con
peligro de congelación e hipotermia, en algunos casos tienen el riesgo de
resbalar sobre el piso mojado producto de la neblina.